La ley de la atracción empieza a trabajar en cuanto ya te has formulado y
definido lo que deseas, si estás de verdad convencido que esa otra persona es tu
pareja ideal o la persona que deseas para compartir tu vida o tener una relación
amorosa,
la ley de atracción te pondrá todo a tu favor para que tú
actúes, pero tienes que tener claro que las personas no son objetos y que también tienen sentimientos, deseos, aspiraciones
y gustos, no se pueden manipular cómo por ejemplo cuando
pedimos una cosa como un nuevo teléfono móvil o un coche, éstos a diferencia de
las personas no pueden tomar decisiones o decir que no.
Con ésto quiero que entiendas que en las relaciones amorosas influyen
también los sentimientos y deseos de otras personas, y cuando deseas a una
persona en concreto entonces allí ya depende de lo que ésa persona desee
también, no sólo de lo que tú quieres.
En la búsqueda de la
pareja ideal es más sencillo lograr atraer una persona que esté vibrando y
buscando lo mismo que tú.
Hay que tener en cuenta que la
Ley de la atracción no es una varita mágica que puede hacer que una persona te
ame así por arte de magia sólo te dará o atraerá las oportunidades para que tú
actúes y lo demás dependerá de la otra persona y sus decisiones.
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