viernes, 23 de enero de 2015

La atracción y los pensamientos


Activa la ley de atracción que hay en tu vida y atrae la prosperidad de este universo rico y prospero. Limpia tu mente, quitando todo pensamiento negativo que haya en ella.
Es muy importante este paso ya que es la base de todo, la mente es poderosa y si en ella albergamos creencias negativas, van a entorpecer el camino para lograr la vida prospera que deseamos.
Nos debemos preguntar, realmente deseamos una vida próspera.
Si es así, trabajemos en quitar todos esos pensamientos negativos que albergan en nuestra mente, quizá muy profundos que no sabemos.
Tus pensamientos son un imán para atraer todo lo que deseas. La ley de atracción se cumple en nuestras vidas, creas en ella o no.

Los pensamientos que tenemos y las palabras que decimos están continuamente formando nuestro mundo y nuestras experiencias. Tenemos el viejo hábito de pensar negativamente, y no nos damos cuenta del daño que nos hacemos a nosotros mismos. Sin embargo, nunca estamos estancados, porque siempre podemos cambiar nuestra manera de pensar. Cuando aprendemos a elegir constantemente. Los pensamientos positivos, los viejos y negativos se disuelven y desaparecen.

viernes, 16 de enero de 2015

El poder del SÍ


Todo lo que llega a nuestra vida es porque antes le dedicamos nuestra atención, energía y foco. Y muchas veces nos enfocamos en lo que no queremos y olvidamos lo que sí queremos. Damos demasiada importancia a las dudas, limitaciones y creencias… Y eso determina el éxito de nuestras atracciones. Por eso, cuando atraemos lo que no queremos es porque estamos dando a las cosas el enfoque equivocado.

Si una persona dice “no quiero que me falte el dinero” en realidad quiere tener abundancia suficiente, pero lo hace con el enfoque equivocado.
Una atracción siempre debe hacerse en forma de afirmaciones, no de negaciones. De lo contrario, atraemos lo que no queremos.
En lugar de decir “NO quiero que me falte el dinero”, es mejor usar una afirmación como “Quiero tener dinero para gastar, invertir y ahorrar”. Si nos centramos en que NO queremos que nos falte el dinero, nos estamos enfocando en la carencia, en la pobreza, en la sensación de angustia por si el dinero finalmente falta… Y, obviamente, eso atraeremos.
En cambio, si nos enfocamos en que SÍ queremos tener dinero suficiente nos estamos enfocando en la riqueza, en una sensación de bienestar y prosperidad, en la tranquilidad que produce la estabilidad e independencia financiera.
Pueden parecer dos maneras de decir lo mismo, pero son enfoques totalmente distintos que producen resultados opuestos.
Un SÍ nos llena de alegría, de energía positiva, optimismo, acción, motivación, buen humor, alegría, vitalidad, bienestar.
En cambio, cuando nos enfocamos en el NO, nos sentimos más tristes, negativos, desmotivados, cansados, rendidos, dudosos, frágiles, incapaces y, a veces, fracasados.

Uno de los pilares de la Ley de Atracción es que lo positivo atrae lo positivo.
Es mucho más fácil que logres atraer a ti lo que deseas si en lugar de centrarte en tus dudas, limitaciones o creencias cambias el enfoque hacia lo positivo.
Un sí es mucho más poderoso que un no, así que a partir de ahora transforma todo lo que no quieres en lo que sí quieres para generar un enfoque más claro y efectivo. Los resultados te sorprenderán.
Para terminar, nos gustaría hacerte una pregunta: ¿Con qué enfoque ves tus objetivos? ¿Te centras en lo positivo, o las dudas y creencias limitan tus atracciones? 

domingo, 11 de enero de 2015

Habla de lo que amas para que lo atraigas


Cuando hablas sobre un problema de dinero, de una relación, una
enfermedad o incluso de que las ganancias de tu negocio han disminuido, no
estás hablando de cosas que amas. Cuando hablas de una mala noticia, o de una
persona o situación que te molestó o te frustró, no estás hablando de lo que
amas. Hablar del mal día que has tenido, de haber llegado tarde a una cita, haber
estado estancado en tráfico o haber perdido el autobús es hablar de cosas que no
amas. Hay muchas pequeñas cosas que ocurren cada día; si te ocupas de hablar
de cosas que no amas, cada una de esas pequeñas cosas traerá más lucha y
dificultades a tu vida.
Tienes que hablar de las buenas noticias del día. Habla de la cita que salió
bien. Habla de cómo te gusta llegar a tiempo. Habla de lo bueno que es tener
buena salud. Habla de las ganancias que quieres lograr en tu negocio. Habla de
las situaciones e interacciones que tuviste en el día y que salieron bien. Tienes
que hablar de lo que amas para que lo que amas venga a ti.
Si repites cosas negativas y te quejas de cosas que no amas, estás
encerrándote literalmente como un pájaro
en una jaula. Cada vez que hablas de
lo que no amas, estás añadiendo una reja más a la jaula y aislándote de todo lo
bueno.